Además, analicé las relaciones entre los diferentes tipos de artistas de la ciudad. Coloqué al artista emergente en el centro, como el factor más importante del mapa. El resto de artistas, se encuentran en el público, pues aunque hagan su propia música, también la consumen. En ocasiones, varios artistas de la escena se agrupan y forman colectivos autogestionados para impulsar la música tanto de la ciudad como de escenas cercanas.

El público general, aunque suele estar más desvinculado con el artista emergente porque este no tiene demasiada visibilidad, puede conocerlo, aunque sea le puede sonar. Aún así, seguramente escuche a artistas algo más posicionados que tengan un vínculo de mayor o menor calidad con el emergente. Los bares y salas, en ocasiones, tienen una relación de buena calidad con algunos artistas, y es así como muchos consiguen conciertos. De todas formas, que el artista tenga una relación de calidad con el dueño de un bar no es lo más común. Las instituciones, la mayoría de las veces, trabajan de forma bastante paralela a los artistas. Es decir, ven la escena completamente diferente a cómo la ve un artista y a no ser que una iniciativa tenga un mínimo auge, no se interesan por ellas (normalmente).  

También analicé la propuesta de valor de la escena y el recorrido común (que no universal) de los artistas emergentes de la ciudad con las que pude esclarecer todavía más cuáles son las necesidades latentes de los artistas emergentes musicales de Pamplona.